Aunque el gobierno mexicano ha rechazado la medida de tercer país seguro para que oficialmente se resguarde a quienes no pueden entrar de manera legal a Estados Unidos, la presidenta Claudia Sheinbaum destacó que continuará con la decisión de deportar a migrantes solo si es voluntario, por lo que se mantendrán los tres albergues en la frontera norte.
“Para poder ser repatriados a su país, tiene que ser de manera voluntaria, no puede hacerse, evidentemente, de manera forzosa.
Si ellos, voluntariamente aceptan, hay esquemas con las instituciones de Naciones Unidas para poder colaborar para que puedan regresar a sus países a través del Instituto Nacional de Migración. Hay protocolos que existen desde hace tiempo y si permanece en nuestro país, será en estos albergues”.
Sin embargo, aunque hay protocolos del lado mexicano, estos han sido desconocidos por el gobierno de Donald Trump, en Estados Unidos, bajo la consigna de echar abajo todo lo instaurado por el exmandatario demócrata Joe Biden. Ahora, asegura Sheinbaum Pardo, que esos mecanismos se mantengan es parte de las pláticas con el gobierno de Estados Unidos porque “dado que ellos interrumpieron distintos esquemas que se tenían de colaboración, necesitamos restablecer esos mecanismos”.
La mandataria mexicana destacó que el número de personas que llegan a la frontera norte ha disminuido “de manera muy importante, es un trabajo al que le pusimos mucha atención desde que llegamos al gobierno, que permita de manera humanitaria orientarlas, darles opciones o si de manera voluntaria quieren regresar, regresan, porque hoy no tiene caso que lleguen a la frontera norte dadas las condiciones que ha planteado la nueva administración de Estados Unidos, del presidente Trump”.
En caso de llegar a la frontera norte hay una atención humanitaria, “porque es una obligación de cualquier gobierno humanitario” y expuso el caso de las bajas temperaturas, de hasta -7 grados Celsius en Chihuahua. “Entonces cómo un gobierno va a dejar a una persona a -7 grados a la intemperie, se les ofrece atención humanitaria y si de manera voluntaria quieren regresar a sus países, existen mecanismos que ya existían desde el gobierno de Biden, para poder ser repatriados a partir de recursos que se establecían a través de organizaciones internacionales y que las opera por ley el Instituto Nacional de Migración”.
Para las personas retornadas, de otras nacionalidades, están disponibles los tres albergues en: Tijuana, Ciudad Juárez y Matamoros, que, reiteró, trabajan desde 2019, cuando fue tomado por distintas instituciones hasta que lo asumió la Secretaría de Bienestar.